En un evento de networking en Londres conocí a un grupo de gente y fuimos juntos al bar "The Alchemist". Por supuesto, no faltaron las copas.
Uno de los chicos -llamémosle Harry- charló con dos mujeres en una mesa cercana, y pronto le seguimos otros dos caballeros y yo.
Harry y una de las mujeres estaban dialogando. Empecé a escucharlo, y pronto el diálogo se convirtió en Harry diciendo cosas como: "Nada de lo que digas me importa, estoy tranquilo".
Por lo que deduje, Harry sintió que ella lo acusaba de mentir.
La propia mujer decía cosas como: "Te estás poniendo una máscara".
Empezaron a dar vueltas en círculos, repitiendo las declaraciones de los demás, en cierto modo intentando demostrar sus argumentos individuales.
Tras unos diez minutos más o menos, la mujer pidió a su acompañante que se marchara y se cambiaron a otra mesa.
Harry se volvió hacia mí y continuó explicándome que le encantan las mujeres, y que le estaba diciendo la verdad, que es una de las personas más honestas, etc.
Le dije que lo dejara estar, y que por supuesto yo sé y él sabe que dice la verdad. Pero que algunas personas perciben las cosas de otra manera, y que es una pérdida de energía intentar demostrarles lo contrario.
He observado esto un par de veces, cuando dos personas se enzarzan en una discusión - a menudo se trata de ciertos patrones y puntos de dolor que se desencadenan, y las personas tratan de evitar el dolor que experimentaron en el pasado.
Hace algún tiempo, escribí la entrada del blog "¿Cómo es no ser provocado?". Imagínate, qué diferente hubiera sido la conversación si esa mujer y Harry hubieran carecía de los desencadenantes individuales: tal vez se habrían reído del malentendido y habrían hecho nuevos amigos esa noche.
Toda percepción es una apuesta. Y se basa, y mucho, en nuestro pasado. Dejar ir el dolor implica desprenderse de un pasado doloroso imaginando un presente y un futuro más equilibrados.
¿Cómo deshacerse de estos desencadenantes?
Una herramienta maravillosa para deshacerse de estos desencadenantes es el herramienta de procesamiento emocional (por Thais Gibson). Utilizado con coherencia, te ayudará a ver que los seres humanos perciben la información a su manera particular. No necesitas que los demás humanos sean de una determinada manera para ser feliz. No necesitas demostrar tu inocencia: recuerda que estas personas no son tus padres y no tienen el mismo poder sobre ti que el que tuvieron tus padres.
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